Según confirmaron fuentes oficiales, el operativo alcanza a la sede local de la AMIA, el Centro Literario Israelita, la Biblioteca Max Nordau, el predio de Macabi y otros espacios culturales y religiosos. También se incrementó la presencia policial en escuelas, templos y zonas de congregación.
La medida fue dispuesta por el Ministerio de Seguridad de la Nación, con apoyo de fuerzas provinciales, federales y organismos de inteligencia, con el objetivo de prevenir eventuales amenazas vinculadas al conflicto internacional.
El refuerzo de seguridad replica operativos similares aplicados en abril de 2024, aunque esta vez con un mayor nivel de coordinación interjurisdiccional. Mientras persisten los ataques cruzados en Medio Oriente, el gobierno nacional mantiene el estado de alerta y monitorea la situación de forma continua.